“Formativo”
quiere decir formado, creado, establecido
en nosotros como se establece un software en el disco duro de una computadora.
Tenemos
pensamientos mecánicamente adquiridos que están almacenados en la memoria de la
parte formativa del centro intelectual.
Estos
pensamientos se reducen a unos pocos puntos de vista con los que juzgamos la
vida y son siempre los mismos.
Al pensar
siempre desde los mismos puntos de vista, éstos se vuelven sentimientos afines a esos puntos de vista y se
almacenan en la memoria de la parte formativa del centro emocional.
Al
experimentar siempre los mismos sentimientos, éstos se vuelven posturas y
gestos motores afines a esos
sentimientos y se almacenan en la memoria formativa del centro motor.
Por esto, al
pensar siempre de la misma manera, se siente siempre de la misma manera y se
reacciona siempre de la misma manera.
Sabemos por
experiencia que en el conocimiento formativo que hemos adquirido hay cosas que
son útiles a nuestros propósitos de vida corriente como es el caso de los
oficios, artes, profesiones y ciencias que nos permiten ganarnos la vida, como
suele decirse.
Pero fuera
de estos campos del conocimiento, principalmente, en lo concerniente a las
relaciones afectivas, nuestro saber adquirido sobre cómo conducirnos con esas
relaciones no tarda en mostrar su completa inoperancia.
Es en este
lado de nuestra vida, es decir, el de nuestras relaciones con las demás
personas, donde el Trabajo nos conmina a cambiar nuestra manera de pensar.
Pero para
cambiar nuestra manera inculcada de pensar necesitamos contar con ideas
enteramente nuevas y estas ideas no pueden encontrarse en las ideas de la
cultura corriente.
Estas nuevas
ideas, estos nuevos puntos de vista que necesitamos para transformar nuestras
vidas, solamente pueden encontrarse en la cultura esotérica.
El simple
hecho de que las ideas esotéricas de las cuáles este sistema es un exponente, no
se enseñen en ninguna universidad de la Tierra , demuestra que estas ideas son enteramente
extrañas para la cultura corriente porque son totalmente diferentes en su visión
de la vida y por eso son consideradas como nuevas,
aún cuando sean, en realidad, más antiguas que la misma humanidad.
Pensar como
todos piensan no demanda ningún esfuerzo.
Basta
dejarse llevar por la corriente de pensamientos ordinarios que cotidianamente
se alternan en nuestras mentes muchas veces sin un propósito definido.
Para poder cambiar
la manera adquirida de pensar, la única forma es confrontar las ideas del
pensar mecánico, con sus puntos de vista fijos, invariables e inmodificables, con
los de la enseñanza esotérica, plena de nuevos significados y de nuevas
emociones.
Un cambio en
la manera de pensar significa un cambio en la manera de sentir y por
consiguiente, de actuar en la vida y por eso, el cambio de la mente es lo
primero.
“Cómo pienses, así sentirás y así actuarás”,
dice un antiguo aforismo.
Por lo tanto,
a través de la observación de los estados negativos que nos producen ciertas
actitudes intelectuales que juzgan la vida, podemos llegar a la conclusión de
que es necesario cambiarlas por otras más inteligentes que nos proporcionen una
nueva y más correcta visión general de las cosas.
Este camino
o vía, llamado hoy Cuarto Camino, no es tanto un sistema de conocimiento sino
más bien un sistema de pensamiento,
un sistema que enseña a pensar de una
manera nueva y que enseña también porqué
es mejor pensar de una manera nueva.
Tengo el libro cuarto camino (Ouspensky) y no podía entender que es pensamiento formativo, pero ustedes me han enseñado lo que es, gracias
ResponderEliminarPor nada, en el libro próximo a editar encontrará muchísima información precisa al respecto, saludos y coméntenos desde donde nos escribe. Gracias
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